Este mes, se contaron un total de 59 acciones colectivas. Entre los principales nudos de conflictualidad, destacaron las protestas de los taxistas contra la aplicación Uber, las cuales se han mantenido constantes durante los últimos meses. También se manifestaron los prestadores de SEETAXI contra la persecución que sufren por parte de la Policía de Tránsito. En el sector de educación, grupos de madres, padres, estudiantes y docentes de distintas escuelas y colegios, suspendieron clases como medida de protesta contra el mal estado de la infraestructura y problemas con las y los funcionarios, principalmente directores y directoras. Asimismo, frijoleros de las zonas norte y sur, se movilizaron en defensa de su producción y solicitando colaboración estatal para colocar sus cosechas. También, trabajadores de la piña que laboran para la empresa Exportaciones Norteñas, ubicada en la fronteriza Los Chiles, se declararon en huelga ante recurrentes problemas en el pago de salarios. Otros conflictos incluyeron problemáticas relacionadas con vivienda, equipamiento urbano y servicios públicos.